* Pedimos al PSOE que se sume a la solución o por lo menos que se eche a un lado y no aliente movilizaciones

2. febrero. 2012.- La diputada regional del Partido Popular María José Ciudad ha explicado hoy lo ocurrido en el Pleno de las Cortes celebrado en el día de ayer, un Pleno en el que se puso de manifiesto de forma más que patente la manera radical de hacer oposición que está protagonizando el PSOE alentando revueltas callejeras y poniéndose a la cabeza de manifestaciones con la más “absoluta irresponsabilidad” y sin la intención de trabajan por “una tierra que nos necesita”.

En este sentido se ha referido a la propuesta presentada por el PSOE para hablar del desempleo de los tres últimos meses. A su juicio “no se puede tener más descaro y se más cicatero”. No sólo no reconocen su responsabilidad en las políticas de empleo que derivaron en 5 millones de parados, ni en las cifras del déficit que intentaron maquillar de cara a las elecciones y que, a pesar de las políticas de María Dolores de Cospedal, han situado a Castilla-La mancha en una muy triste primera posición a nivel nacional; sino que además, se niegan a reconocer que hay un Gobierno eficiente y trabajador que está tomando las medidas que ellos no quisieron o no pudieron tomar.

En cuanto a la polémica generada sobre los Centros de la Mujer, María José Ciudad ha querido aclarar que no sólo se van a mantener las subvenciones, sino que se van a aumentar en la medida del posible, siempre desde una política de gestión clara y transparente muy alejada del despilfarro del que el PSOE siempre ha hecho gala.

Y es que, según Ciudad, el PSOE “no tienen ideas, no tienen proyecto y sólo pretende recuperar el poder, un poder que ostentaron durante 28 años y que han llevado a esta tierra a la situación en la que nos encontramos”.

Por último, María José Ciudad ha insistido en que el PP ha hecho siempre un claro llamamiento a la unidad de todos para trabajar por esta tierra, pero nos hemos encontrado con espectáculos como el que ayer ofreció el PSOE en las Cortes, un organismo al que no mostraron ni el más mínimo respeto. “Aquí no estamos para jugar, no estamos para hacer estrategias, ni para hacer una política burda de pancarta y huelga” cuando atravesamos un momento de emergencia económica y social.