Declaraciones del vicepresidente de la FEMP- CLM
· “Los ayuntamientos están preocupados por la campaña de verano ante los aumentos previsibles de las temperaturas y el brutal recorte de Page en las partidas autonómicas de colaboración con las Entidades Locales en materia de prevención de incendios”
10, junio, 2016.- El vicepresidente de la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (FEMP-CLM) y Alcalde de Membrilla, Manuel Borja, ha alertado hoy sobre el peligro de incendios forestales ante la campaña de verano y el brutal recorte de las partidas del presupuesto autonómico de prevención de incendios para 2016 llevado a cabo por Emiliano García-Page en relación con las transferencias habituales en materia de colaboración con las Entidades Locales de CLM y que suponen “un 98% menos que el año anterior” ya que han pasado de 5,5 millones de € a 0,1.
Manuel Borja ha exigido al máximo responsable autonómico la inmediata dotación en el ámbito local de los recursos necesarios para la prevención de incendios y la protección del medio rural ante las consecuencias devastadoras, tanto económicas como sociales, que se producirían en los municipios de la región que se vieran afectados por los mismos.
Por eso, ha añadido, “no es lógico que, prácticamente, haya desaparecido la partida de colaboración con las Entidades locales en materia de prevención de incendios” y ha tachado este comportamiento de García-Page de “temerario e irresponsable” al colaborar, con su actitud y pasividad, a que incendios de miles de hectáreas, como los que -desgraciadamente- ya se han producido en CLM, pudieran volver a repetirse.
Así, Borja no alcanza a entender cómo se recorta en una materia “tan esencial como ésta” quitando a las Corporaciones Locales; unos recursos que “podrían ser vitales para actuar de forma inmediata ante cualquier conato que pudiera producirse”.
Por último, Manuel Borja, ha hecho a García-Page “un llamamiento al sentido común, para retomar la colaboración con las Corporaciones Locales, dotarlas de los recursos necesarios en materia de prevención de incendios y evitar tener que lamentarnos más tarde, cuando ya no haya solución, tanto de los desastres naturales como, en su caso y mucho más importante, de las desgracias personales que pudieran producirse y que todos tenemos en la memoria reciente de nuestra región”.
